Aumenta la importancia de la inspección periódica de vehículos

01 jun 2017 Ingeniería Automovilística
En el caso de que se hayan instalado sistemas de conducción asistida y automatizada en el automóvil, se debe asegurar que estos sistemas funcionen de manera fiable durante toda la vida útil del vehículo – igual que los sistemas de seguridad activa y pasiva – porque solamente de esta manera pueden desplegar el efecto deseado. Por esta razón, en un futuro será cada vez más importante efectuar una inspección técnica periódica ya existente en muchos países a nivel mundial – también debido al aumento de la complejidad en los sistemas y al peligro de una manipulación electrónica de estos. Diversos estudios han mostrado que la electrónica de los vehículos está sometida a un cierto desgaste y que, además no estar libre de errores de sistema, puede ser manipulada, anulada e incluso desinstalada del vehículo. Investigaciones llevadas a cabo por parte de la Asociación Internacional de Inspecciones Técnicas de Vehículos (CITA) han demostrado que los sistemas vehiculares controlados electrónicamente muestran el mismo nivel de avería y malfuncionamiento por desgaste que los sistemas mecánicos. Las averías aumentan tanto con la edad útil del vehículo como con los kilómetros recorridos. A pesar del desarrollo de los componentes electrónicos, los sistemas mecánicos siguen desempeñando un papel importante en la seguridad vial. En este sentido, en el marco de una inspección técnica se examina con detenimiento a los sistemas de frenada y dirección así como a los dispositivos de alumbrado, ejes, ruedas y neumáticos, suspensión, chasis, marco y construcción o las condiciones de visibilidad, para solo nombrar algunos ejemplos. La importancia de estas inspecciones se ha hecho evidente en Francia. Después de la obligatoriedad del Contrôle Technique en 1992, aumentó de manera notable el estado técnico de los vehículos que circulaban por las carreteras francesas.
Según las estadísticas de DEKRA, el índice de deficiencias se redujo en más de un 50 por ciento en numerosos componentes, como por ejemplo los frenos o los dispositivos de alumbrado. También Turquía es un buen ejemplo de las grandes ventajas de las inspecciones técnicas periódicas (PTI) para la seguridad vial. Hasta finales de 2007 se implantó la inspección técnica mediante una red nacional de puntos de inspección, tratándose de un control visual en el que se comparó las indicaciones en la documentación del vehículo con las condiciones del automóvil. La inspección solamente contemplaba la navegabilidad del vehículo. En 2008 se implantó una inspección PTI basado en el modelo europeo con unas normas definidas. Desde esta fecha, la cifra de víctimas mortales se ha reducido en un 40 por ciento en unos pocos años. Asimismo, el ejemplo del estado norteamericano de Idaho demuestra la efectividad de la inspección periódica. Aquí se suspendió el programa PTI en 1997 llevado a cabo hasta este momento. Solamente dos años después se contabilizó un aumento significativo en el número de vehículos inseguros o con defectos mecánicos. De la misma manera, las condiciones de los sistemas de frenada en vehículos antiguos era mucho peor que antes de la anulación del programa PTI. Adicionalmente se registró un notable empeoramiento en los sistemas de dirección, suspensión y de la cadena cinemática. El estado norteamericano de Tejas, sin embargo, implantó el programa PTI en 1999 – en un periodo muy corto ser redujo la siniestralidad por causa de defectos en los vehículos de un doce a un cuatro por ciento. Dicho esto, el programa PTI podría tener efectos muy positivos en muchos países emergentes o en vías de desarrollo.