En caso necesario, evite adelantar
Cuando llegan las tormentas de primavera, es necesario mantener la máxima concentración al volante. «En cualquier momento, la intensidad y la dirección del viento pueden cambiar bruscamente y, con ello, la situación del tráfico», advierten los peritos de DEKRA. «A veces basta con una simple ráfaga de viento para empujar el vehículo fuera del carril y hacer necesario un golpe de volante hacia al lado contrario», dice el experto en accidentes Thomas Gut. «En estas situaciones, es igual de importante reducir la velocidad. Quienes conducen más despacio, tienen más tiempo de reaccionar y pueden resolver las situaciones peligrosas más fácilmente.»
La peligrosidad es especialmente elevada en puentes, veredas forestales y salidas de túneles. En estos casos, los conductores se ven a menudo sorprendidos por ráfagas de viento repentinas. Por este motivo, en muchos de estos puntos expuestos se colocan placas de aviso o mangas de viento. «No se deben subestimar los peligros derivados del viento lateral, incluso al adelantar camiones o autobuses. En estos casos, los conductores deben corregir primero la dirección al entrar en el rebufo y, después de adelantar, volver a colocar el vehículo contra el viento», explica Gut.
Si el temporal es demasiado fuerte, puede que sea aconsejable esperar a que amaine el viento antes de adelantar. En algunas circunstancias, el vehículo adelantado también puede verse repentinamente desplazado fuera de su carril a causa de una fuerte ráfaga de viento. Se debe tener especial cuidado cuando se conducen furgonetas, autocaravanas y caravanas o vehículos con cofres de techo instalados. Las grandes superficies de ataque laterales son un problema, ya que, en este caso, se debe contar con fuerzas del viento elevadas que, en el peor de los casos, pueden incluso volcar vehículos.
«Las reglas más importantes a la hora de conducir en temporales son: reducir la velocidad, sujetar firmemente el volante con ambas manos y, en caso necesario, evitar los adelantamientos», recomienda el experto en accidentes. «Preste especial atención a las placas de aviso y las mangas de viento en los puentes de las autopistas, por ejemplo. Cuando la velocidad del viento es elevada, a menudo es mejor interrumpir el viaje y esperar en un lugar protegido hasta que haya amainado». Sin embargo, se debe evitar estar cerca de árboles, ya que es posible que se rompan ramas o que estos lleguen a caerse.