Instalaciones para la protección de los motoristas

08 nov 2020 Infraestructuras
En lo relativo a la mejora de la seguridad vial para los motoristas, los guardarraíles desempeñan un importante papel. Según concluyen numerosos investigadores en materia de accidentes, en Alemania alrededor del 80 % de los motoristas fallecidos en zonas no urbanas pierden la vida debido a algún obstáculo; en casi la mitad de los casos, se trata de los guardarraíles. El problema es que, por defecto, se siguenconstruyendo innumerables barreras de seguridad de acuerdo con su propósito inicial, de tal forma que la bionda se encuentra a la altura del capó de un coche. Así, ofrecen la mayor protección posible para los automovilistas, pero la distancia abierta hasta el suelo plantea grandes riesgos para los motoristas. Si un motorista sufre una caída, existe el riesgo de que se deslice por debajo de la barrera o choque contra uno de los postes de apoyo. A menudo, las lesiones resultantes son graves o incluso mortales. Sin embargo, las barreras de seguridad también pueden diseñarse de tal manera que ofrezcan la mayor protección posible a los motoristas en caso de un posible impacto.
A este respecto, en muchos lugares, la combinación de una parte superior de superficie ancha, como un perfil hueco rectangular, con una viga debajo de los largueros para evitar chocar contra el poste ha probado su eficacia tanto en las simulaciones de accidente como en los siniestros reales. Las vigas pueden utilizarse para readaptar numerosos sistemas existentes. Por ejemplo, el sistema Euskirchen Plus perfeccionado hace años por DEKRA por encargo del Instituto Federal de Carreteras alemán (BASt, por sus siglas en alemán) ofrece una protección relativamente alta a los motoristas en caso de colisión. Se ha demostrado un mejor efecto protector tanto para las motocicletas que circulan en posición vertical como para las que se deslizan de lado. Las estadísticas de la asociación Más Seguridad para los Motoristas (MEHRSi, por sus siglas en alemán) indican que, afortunadamente, las autoridades responsables de las infraestructuras viarias alemanas cada vez instalan más protecciones inferiores en tramos en curva. Según estos datos, en once estados de Alemania ya se han instalado alrededor de 113 km de protecciones inferiores en al menos 900 curvas. En comparación, en 2010 eran apenas 500 curvas con casi 63 km de protección inferior.

PANELES DIRECCIONALES PARA CURVAS DE PLÁSTICO

Una medida importante para reducir las consecuencias de las lesiones después de una caída, además de la readaptación de las instalaciones existentes con protecciones inferiores, es la sustitución en las curvas de los paneles de dirección rígidos fijados a tubos de acero por sistemas flexibles. Con este objetivo, el Ministerio de Transporte de Baden-Wurtemberg, en cooperación con una empresa de equipamiento de carreteras del mismo estado, ha desarrollado un panel direccional para curvas fabricado en plástico. El sistema, presentado por primera vez en 2014, consta de una superficie de señalización de 50 cm2 que se coloca sobre un dispositivo de sujeción de plástico con una forma idéntica a un poste delineador y se atornilla a él.
El valor añadido de esta innovación para la seguridad vial se demostró de manera impactante en una simulación de accidente de DEKRA en 2017. En la prueba, se hizo colisionar una motocicleta a 60 km/h contra el sistema estándar existente de señalización de curvas, la «placa metálica sobre poste de acero», y contra el nuevo sistema de plástico. Los valores de carga medidos en la colisión contra el poste de acero se encontraban muy por encima de los valores biomecánicos límite, mientras que los valores de carga en la colisión contra el panel direccional para curvas estaban muy por debajo de los valores límite. Por lo tanto, el motorista no habría sobrevivido a la colisión contra el poste de acero. Sin embargo, la colisión contra el nuevo panel direccional para curvas habría provocado únicamente lesiones menores a un motorista con la ropa de protección adecuada.
Otra ventaja de los paneles direccionales para curvas fabricados en plástico es su buena visibilidad para los usuarios de la carretera. Las evaluaciones de accidentes en la carretera federal 500 de la Selva Negra, realizadas con una herramienta de control de la seguridad vial propia del estado, muestran que los paneles direccionales no solo mitigan las consecuencias de los accidentes, sino que también pueden tener un efecto preventivo por su buena visibilidad, de forma que determinados accidentes de motocicleta ni tan siquiera se producirían. Mientras que en el tramo de Hornisgrinde de dicha carretera B500 ocurrieron entre 2012 y 2014 —es decir, en el plazo de tres años— once acci-dentes con dos fallecidos, entre 2015 y 2019 —es decir, durante los cinco años posteriores a la instalación de los paneles direccionales en curvas especialmente críticas— solo se produjeron siete accidentes sin fallecidos. Sin embargo, de forma complementaria, también se aplicaron otras medidas, como la colocación de protecciones inferiores en los guardarraíles, limitaciones de velocidad y controles policiales de la velocidad.
Finalmente, al hablar de las medidas relativas a la construcción de carreteras, no podemos olvidarnos del mantenimiento regular del pavimento de la calzada. Para la seguridad de los motoristas, un pavimento con el mejor agarre y uniformidad posibles desempeña un papel fundamental. Esto se debe a que los coecientes de fricción insuficientes prolongan la distancia de frenado y aumentan el riesgo de perder el control lateral en las curvas o en las maniobras evasivas y, con ello, el riesgo de salir despedido. Para los motoristas también es muy peligrosa la gravilla en las curvas, especialmente, durante el primer mes posterior al invierno o cuando los tractores, turismos o camiones «recogen» la gravilla junto a la carretera y la arrastran a la calzada. A pesar de las máquinas barredoras modernas, esto siempre puede ocurrir y afectar a los motoristas en el momento más inoportuno. Por otra parte, las irregularidades de la calzada también pueden favorecer la acumulación de agua y, de esta forma, aumentar el riesgo de aquaplaning y de formación de hielo. Esto también se debe tener en cuenta en los trabajos de reparación. Además, la masa asfáltica que se sigue utilizando con frecuencia en algunos países para reparar baches o grietas se convierte rápidamente en un peligro para los motoristas, ya que, con la humedad, la superficie de la calzada se vuelve extremadamente resbaladiza. Por ello, las reparaciones solo deben realizarse con materiales que tengan coeficientes de fricción similares a los del resto del pavimento, para evitar que la carretera se convierta en una pista de patinaje.

LA MASA ASFÁLTICA DEBE EVITARSE EN LOS TRABAJOS DE MEJORA DE LAS CARRETERAS SIEMPRE QUE SEA POSIBLE.