Sistemas de asistencia a la conducción en bicicletas eléctricas

20 may 2021 Ingeniería Automovilística
Las cifras de ventas de bicicletas eléctricas aumentan de forma constante desde hace años y la crisis del coronavirus no parece haberlas frenado, sino todo lo contrario. Otra de las razones de este éxito es que las bicicletas eléctricas interesan a personas de todas las edades. Los ciclistas de edad avanzada en particular se benefician de su manejo intuitivo, su alta velocidad media y su facilidad para subir pendientes. Por una parte, esto aumenta considerablemente el radio de acción de los usuarios y, por otra, exige también una cantidad saludable de ejercicio físico. No obstante, el número en aumento de accidentes de bicicletas eléctricas con la implicación de conductores mayores indica que este segmento de la población, que seguirá creciendo en el futuro, requiere sin lugar a duda sistemas de asistencia a la conducción que eviten completamente los accidentes o, al menos, minimicen su gravedad.
El sistema antibloqueo desarrollado por Bosch es muy prometedor. Este sistema de asistencia, descrito con detalle en el último informe de seguridad vial de DEKRA, evita el frenado en exceso de la rueda delantera. Su gran valor añadido no es tanto preservar la maniobrabilidad durante los frenados bruscos sino más bien prevenir la pérdida de control en caso de que la rueda delantera se bloquee. Así, el sistema permite a los ciclistas utilizar de forma fácil y segura los frenos de la rueda delantera con la máxima desaceleración posible sin correr el riesgo de que la rueda delantera resbale o de salir despedidos por encima del manillar.
Para identificar otros potenciales, los sistemas de asistencia a la conducción orientados a la seguridad, que ya habían demostrado su eficacia en otras clases de vehículos, se utilizaron como base para el proyecto de investigación «Sistemas de asistencia a la conducción orientados a la seguridad para bicicletas eléctricas» (SIFAFE, por sus siglas en alemán). Para su uso en bicicletas eléctricas, estos sistemas se evaluaron, adaptaron y desarrollaron con respecto a su idoneidad. Para ello, se tuvieron en cuenta tanto condiciones básicas desde la óptica de la tecnología de los vehículos (posibilidad de montaje, demanda energética, robustez, costes) como aspectos relativos a la ciencia del tráfico (eficacia, aceptación de los usuarios, distracción durante el manejo). Los objetivos del proyecto eran el análisis del potencial, la concepción, la realización ejemplar y la evaluación de sistemas de asistencia orientados a la seguridad para bicicletas eléctricas.
En lo que respecta a la seguridad del tráfico ciclista, dentro del proyecto se realizó un análisis de accidentes de bicicleta eléctrica y de la eficacia del sistema. Desafortunadamente, este análisis muestra deficiencias en la interpretación de los resultados y en la conclusión resultante. No obstante, el análisis llevado a cabo permite afirmar que los sistemas priorizados tienen un alto potencial para evitar numerosos accidentes o, por lo menos, para reducir la gravedad de sus consecuencias. Además, se ha demostrado que existe un gran potencial de mercado: una encuesta realizada a 300 usuarios reveló que muchos desearían tener estos sistemas de asistencia. También se ha constatado que los sistemas de asistencia a la conducción cuentan con una gran aceptación entre la gente. Más del 80 % de los encuestados valoraron positivamente los sistemas de asistencia a la conducción y un 66 % de los participantes estaban dispuestos a gastar hasta 300 € adicionales en sistemas de asistencia para bicicletas eléctricas.
En la parte práctica, dos terceras partes de los conductores que participaron en la prueba calificaron como fiables los sistemas basados en sensores, como las advertencias de cambio de carril y de colisión frontal. A partir de los recorridos de prueba, en los que también se probaron diferentes estrategias de advertencia, se observó que las alertas táctiles al conductor mediante mangos que vibran son especialmente intuitivas, incluso por delante de las alertas visuales/auditivas. Por ejemplo, al acercarse al borde derecho del carril vibra el mango derecho, al acercarse a la izquierda, el mango izquierdo y, en caso de un aviso de colisión frontal, ambos mangos a la vez. En general, el estudio demuestra que los sistemas de asistencia a la conducción también pueden contribuir a la mejora de la seguridad de las bicicletas eléctricas y que hay una gran necesidad de investigación.