Familiarícese con su uso
Aunque los automóviles son cada vez más seguros, los niños suelen ser quienes sufren más lesiones en el tráfico rodado. Las lesiones más graves y preocupantes se producen cuando los niños viajan en coche sin utilizar ningún sistema de seguridad en absoluto. «En una colisión a 50 km/h, las fuerzas de impacto son iguales a las de una caída desde un cuarto piso», explica el investigador de siniestros de DEKRA Markus Egelhaaf. Si, por el contrario, el niño viaja con un sistema de retención adecuado, el riesgo de accidente mortal se reduce hasta en un 80 %, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En muchos países, los niños pueden viajar en coche solamente si lo hacen con un sistema de retención infantil adecuado. En Alemania, por ejemplo, esto se aplica hasta los12 años de edad, a no ser que el niño alcance antes los 1,50 metros. Según la actual normativa europea UNECE-R 129, los sistemas de retención infantiles se dividen en grupos según el tamaño del cuerpo. El sistema de retención Isofix se ha impuesto como estándar en muchos automóviles modernos. Con este sistema, la silla infantil puede fijarse de forma fácil y segura y se descarta en gran medida su uso incorrecto. En otras soluciones se utiliza el cinturón de seguridad. «En cualquier caso, familiarícese bien con el uso del sistema de retención infantil y compruebe antes de cada viaje si el sistema está fijado y el niño está correctamente sujeto, ya que su seguridad depende de ello», recomienda Egelhaaf.
También están de moda los sistemas de retención infantiles en sentido contrario a la marcha, también llamados reboarder, donde los bebés viajan de espaldas al sentido de la marcha y, por lo tanto, protegidos de la mejor manera posible. «En este asiento, las fuerzas de impacto que se producen en caso de accidente o frenazo brusco se distribuyen sobre una superficie mucho mayor, de la espalda a todo el cuerpo del niño, pero protegiendo también la cabeza. Se adapta muy bien a la anatomía de los niños pequeños», explica el investigador de siniestros. Los sistemas de retención infantiles para bebésse construyen básicamente según la normativa para que viajen orientados hacia atrás. También hay sistemas de retención infantiles en sentido contrario a la marcha para niños más mayores, para hasta los cuatro años. Sin embargo, no a todos los niños les gusta viajar en sentido contrario a la marcha.
Si se lleva a un niño en un sistema de retención infantil para bebésen el asiento del copiloto, no se debe olvidar desconectar el airbag del pasajero. De lo contrario, el airbag podría lesionar gravemente al niño al inflarse. Información importante: según los estudios, los niños suelen viajar mejor protegidos en los asientos traseros.
Si está pensando en comprar un sistema de retención infantil, debe fijarse en el sello de calidad que figura en la etiqueta naranja del mismo. Dicha normativa UNECE-R 129 difiere de la normas anteriores, entre otras cosas, por los requisitos adicionales para la protección contra impactos laterales de los sistemas de retención infantiles, los cuales se prueban en un ensayo especial de impacto lateral. El uso de sistemas de retención infantiles que cumplan con las normas anteriores UNECE-R 44/04 o 44/03 sigue estando permitido, pero no ofrecen la misma protección. Estas sillas infantiles dejarán de fabricarse a partir de finales de este año, y las nuevas deben cumplir la normativa UNECE-R 129.
Al comprar un sistema de retención infantil, compruebe siempre si es adecuado para el vehículo. La página web del fabricante o las listas que acompañan a la silla pueden ser de ayuda. También es aconsejable que el niño pruebe el sistema de retención; al fin y al cabo, no solo debe ir seguro durante el viaje, sino también sentirse cómodo.