Mantener una presión correcta de los neumáticos es decisivo

26 jun 2020 Noticias y acciones

El comportamiento de frenado y de marcha difiere según la presión de los neumáticos

El mundo está plagado de numerosos mitos y medias verdades respecto a la presión correcta de los neumáticos. «Unos circulan con una presión de inflado baja porque se supone que mejora el agarre. Otros la aumentan 0,5 bares para reducir la resistencia a la rodadura y, con ello, el consumo de combustible», explica Christian Koch, experto en neumáticos de DEKRA. Recientes pruebas realizadas por DEKRA concluyen con una recomendación inequívoca. Y es que esta organización de expertos, en colaboración con la Universidad de Formación Dual de Baden-Wurtemberg (DHBW) en el marco de un trabajo de fin de grado, ha probado el comportamiento de frenado y de marcha de neumáticos con diferentes presiones sobre calzada seca.
«Tras cientos de frenadas se ha demostrado que cuanto más baja es la presión de inflado, más corta es la distancia de frenado. Pero esta es solo una cara de la moneda», apunta el experto en neumáticos. «Los ensayos de marcha que hemos realizado, como recorridos en eslalon y maniobras evasivas, nos han permitido comprobar que si la presión de inflado es baja, también disminuye considerablemente la precisión direccional». Esto merma la sensibilidad en la conducción. Es decir: el vehículo reacciona con gran lentitud al manejo del volante por parte del conductor. A velocidades elevadas, puede llegar a ser incontrolable. «Además, el comportamiento del neumático sobre cazada mojada es el contrario: en este caso, con una presión de inflado alta es cuando se obtienen las distancias de frenado más cortas», explica Christian Koch. Los resultados extraídos de esta serie de ensayos no le sorprenden: «Las exigencias a las que se ve sometido un neumático son muy diversas. Por este motivo, incluso el mejor neumático siempre debe encontrar un denominador común para conciliar de la mejor manera posible todos los diferentes requisitos a los que debe hacer frente».
De ahí que su recomendación a conductores y propietarios de vehículos sea clara: «Utilicen la presión de inflado indicada por el fabricante del vehículo y el fabricante del neumático según el correspondiente estado de carga del vehículo». Estas prescripciones suelen venir indicadas en una pegatina adherida a la tapa del depósito de combustible o al montante B en la zona de la puerta del conductor. «La mejor forma de conseguir este denominador común es con la presión de inflado prescrita. Cualquier desviación significativa respecto a este valor suele repercutir de forma negativa, traduciéndose en un comportamiento desequilibrado del neumático».