Seguridad en las estaciones de servicio gracias a inspecciones periódicas

04 abr 2016 Infraestructuras
El estado de la seguridad técnica y vial de un vehículo es indispensable para una participación segura en el transporte por carretera. En este contexto, un usuario de la vía pública debe asegurarse que su vehículo no se averiará a causa de falta de combustible y se convierta en un peligro para la circulación. El repostaje es un proceso natural en el uso de un vehículo. Pero casi nadie piensa que el proceso de repostar en si y el funcionamiento de una estación de servicio pueden ser críticos desde el punto de vista de la seguridad. Las estaciones de servicio están incluidas en las ‘instalaciones sometidas a vigilancia especial’ y deben ser revisadas periódicamente – por ejemplo por organizaciones de expertos como DEKRA – tanto en Alemania como en muchos otros estados en base a distintos ámbitos legislativos.
En el marco de la inspección de la seguridad contra incendios y explosiones en una estación de servicio, por ejemplo, se revisan las instalaciones eléctricas y todos los surtidores de combustible así como todas las cañerías y tanques de almacenamiento para evitar posibles pérdidas de combustible. Cada estación de servicio debe estar equipada con una playa impermeable contra líquidos para evitar la contaminación del suelo. Los drenajes de estas playas pasan por un sistema de separadores. Por esta razón se debe revisar periódicamente el estado de la zona de recepción y de la planta separadora, puesto que en una estación de servicio se suelen almacenar un promedio de 100.000 litros de combustible. Sería un desastre inimaginable si una fuga de combustible contaminase las aguas subterráneas. Tampoco se debe subestimar el peligro de explosión ya que la gasolina es un líquido altamente inflamable que se evapora a una temperatura muy debajo de la temperatura ambiente creando una atmósfera explosiva. La llamada recuperación del vapor es la responsable de un repostaje seguro e ‘inoloro’ de un vehículo con gasolina. Cada manguera esta equipada con un dispositivo de extracción que recoge los vapores de los hidrocarburos liberados durante el repostaje en el depósito del vehículo y los transfiere a los tanques de almacenamiento subterráneas. Estos dispositivos también deben ser revisados en base al código del medio ambiente.
Nuevas exigencias derivan del hecho que se ofrecen cada vez más combustibles gaseosos. Actualmente existen en Alemania casi 6.000 estaciones de servicio de gas, la mayoría de ellas en el terreno de las gasolineras ‘normales’ de gasolina y diésel. Aquí se debe prestar especial atención a la seguridad en la interacción de estos hidrocarburos tan distintos.